I don't like mondays

A quién se le habrá ocurrido la genial (léase pésima) idea de ponernos por delante anhelos de trascendencia con eso de "plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo"... (¿van en ese orden?)

Es decir, conozco mucha gente que ya ha cumplido con todas o algunas de estas acciones (¿será correcto llamarlas así?), pero para quienes no hemos hecho ninguna, y que a juzgar por lo hechos... mmmm bueno, uno nunca sabe, pero digamos que al menos dos de ellas no son nada fáciles. Convengamos que eso de tener hijos no es una trivialidad (y no es que una ande buscando el gen perfecto, pero un mínimo de buenos atributos de la especie son indispensables) y lo de escribir el libro, bueno, es que una tiene su dignidad y respeto por quienes saben darle al BIC un uso noble.

Entonces queda plantar el arbol... ¿pero dónde? vivo en un 4º piso sin terraza, y con una foto de balcón con dos plantas que, cada vez que riego, despiertan el odio de mi vecina de abajo (la clasica vieja guatona con cachirulos y pintada como payaso, lista para salir a ningun lugar).

Ahora, como mi política es la de evitar las quejas y actuar en consecuencia, propongo erigir nuevos paradigmas experienciales que impulsen nuestro sentimiento de que "la vida ha valido la pena y nuestra huella perdudará en el tiempo".

Si usted ha experimentado alguno de ellos puede sentirse tranquilo (a) (y también vale aunque no hayan ocurrido intencionalmente)

- Recibir palos y/o tirar piedras a los pacos durante la dictadura.
- Preparar una bomba de olor para incentivar el caos estudiantil previa toma del Liceo.
- Leer (más puntos si lo compró con su propio dinero) el Fortín Mapocho.
- Participar más de un año en algún taller artístico cuando niño (ballet, cerámica, pintura, danza, teatro, guitarra, en fin...)
- Fumar cigarrillo escondido (a) con la fantasía de que nadie se daba cuenta después de un chicle.
- Beber más de la cuenta al punto de perder la conciencia (literalmente).
- Asistir a un concierto de Charly García, de esos inolvidables por su ausencia.
- Terminar en urgencias con suero y calmantes después de una intoxicación con mariscos.
- Que una persona en la calle le sonría porque sí no más.
- Reciclar botellas, cartones, plásticos y latas en sus respectivos contenedores.
- Hacer pacto de sangre con tajo y unión de sangres.
- Tener sexo sin amor.
- Tener sexo con amor.
- Tener sexo.
- Donar $ a quienes piden con una bolsita de género cosida a un cuadrado de trupán y te regalan un sticker.
- Viajar sentado en la Ovalle Negrete o en la Matadero Palma.
- Pedir plata en la calle para la micro, cuando en realidad era para comprar galletas tritón.
- Utilizar torpedo para las pruebas: escribirse en los muslos las respuestas, escribirlas con una aguja en un lapiz BIC, rascarse la nariz A - tocarse la oreja B - toser C -, y tantos otros.
- Vivir frente a una iglesia.
- Ver el Chacal de Nahueltoro.
- Recordar en cada fiesta "si camino no hablar..."
- Tener amigos (as), que en realidad son amigos (as) de tus amigos (as).
- Ser parte de cualquiera de las grandes redes sociales digitales: feisbuc, tuiter, maispeis, orkut (ahí quedaron nativos digitales) o similar.
- Tener como primer correo MIXMAIL.
- Asistir a una función de Marat Sade dirigido por Fernando Gonzalez el año 91.
- Tener una pelea a combos, tirones de pelo y/o mordiscos.
- Ver la película francesa Le Ballon Rouge (más puntos si la vió en el Chileno Francés cuando estaba en Miguel Claro)
- Conocer a Eliana Quevedo. Conocer la casa de los Quevedo.
- Leer a Ítalo Calvino.
- Escuchar vinilos de Le Luttiers.
- Ver sangre ajena en la parca celeste de tu madre a los 5 años.
- Comer cubos en pleno verano.
- Jugar rin raja pero con scotsh en mano (de pegar no de tomar).
- Quebrar la botella de Coca Cola por venir pajaroneando en el camino de vuelta desde el negocio de la esquina.
- Irse de la zapatería con los zapatos nuevos puestos.
- Tener estuche con clave.
- Escribir con pluma y tinta verde.
- Jugar al colgado y a los puntitos con la abuela o el abuelo.
- Viajar.
- Saber el significado de tu nombre.
- Andar en bicicleta (más puntos si es por la calle)
- Dejar volar la imaginación.
- Practicar Yoga.
- Escuchar Radio Moscú.
- Tocar cacerolas.
- No querer que sea lunes.